¿Pueden los Familiares de las Víctimas del Submarino Titan Presentar una Demanda?
Expertos Advirtieron Consecuencias Catastróficas Porque el Submarino Tenía un “Diseño Experimental y no Había Sido Probado”
Durante cuatro días, el mundo quedó cautivado con una historia intrigante y sobrecogedora: la desaparición del submarino turístico Titan. O mejor dicho, sumergible. La embarcación que transportaba a cinco tripulantes para ver los restos del Titanic ha ocupado las televisiones de millones de personas en todo el mundo. Aunque todos deseábamos un desenlace épico, los resultados no fueron los esperados. La nave no fue localizada dentro de las 96 horas de oxígeno de que disponían. Sin embargo, lo más enrevesado de esta historia es su inquietante contexto, el cual ha llevado a la desgracia a cinco familias. Estas, probablemente, inicien una demanda contra la empresa fabricante del submarino Titan por muerte por negligencia.
Dejando a un lado el motivo de la muerte, que se investigará en los próximos meses, aunque ya se ha confirmado que murieron por implosión, la pregunta que muchos nos hacemos es: ¿de quién es la culpa? ¿Podría haberse evitado el incidente? ¿Qué medidas de seguridad había en caso de accidente? Como veremos, varios expertos y tripulantes de la expedición afirman que la nave estaba construida de manera precaria y tenía fallos.
Además de los defectos del submarino, antiguos pasajeros del sumergible han corroborado que la empresa obliga a cada miembro de la tripulación a firmar una exención de responsabilidad en caso de lesión o muerte. Pero, ¿hasta qué punto puede una empresa salir indemne de un accidente mortal cuando sabe que su producto es defectuoso y pone en peligro vidas? En este blog ponemos voz a la historia desde la perspectiva de las lesiones personales. Siga leyendo si no quiere perderse los entresijos legales que rodean a una de las catástrofes marítimas más famosas de todos los tiempos.
La Catástrofe del Sumergible Titan: ¿Qué ha Ocurrido?
Empecemos la historia desde el primer día de la desaparición. La embarcación Titan se preparó para iniciar la expedición a las 6 de la mañana del domingo 18 de junio. Había un total de cinco personas a bordo. Entre ellas el piloto, Stockton Rush, quien era el CEO de OceanGate, el fabricante del sumergible. Los otros cuatro pasajeros habían pagado $250,000 para ver el lecho marino donde descansa la nave histórica.
Para acceder a los restos del Titanic, el buque tiene que descender hasta 4,000 metros (13,000 pies); es uno de los pocos sumergibles del mundo capaces de alcanzar grandes profundidades. Haciendo honor a su nombre, está fabricado con fibra de carbono y titanio. Estos metales son necesarios para soportar la alta presión de 400 atmósferas.
La travesía dura alrededor de ocho horas que se divide en tres fases: dos horas y media de descenso, tres horas de exploración del Titanic, y dos horas y media para la ascensión de regreso a la superficie. En total, la nave contaba con un total de 96 horas de oxígeno para casos de emergencias.
Las comunicaciones del submarino Titan se perdieron una hora y 45 minutos después de comenzar la inmersión. A pesar de perder la señal alrededor de las 9 a.m., el equipo no avisó a la Guardia Costera de Estados Unidos hasta pasada las cinco de la tarde. Una vez se dio la voz de alarma, decenas de expertos y antiguos pasajeros de la expedición comentaron lo que podría haber ocurrido.
Los relatos de experiencias previas a bordo del Titan, el modelo de construcción, y las declaraciones de antiguos empleados hacían presagiar lo peor.
Cinco días después de la desaparición, OceanGate confirmó que los cinco tripulantes murieron por implosión.
El Buque no Estaba Aprobado por Ningún Regulador
En 2009, Stockton Rush fundó OceanGate, con sede en Everett (Washington). Desde que iniciaron el proyecto en 2021, el buque Titan ha realizado la travesía tres veces. Una por año, siendo este último un viaje mortal.
Las especulaciones sobre la nave y su fabricación siempre han estado a la orden del día. Su funcionamiento y control se han descrito como precarios y básicos. De hecho, se maneja con un mando de juegos inalámbrico Logitech, y el ascenso y descenso funciona con un solo botón. Pero eso no es todo, ya que el sumergible no tiene radar ni sistema de navegación GPS.
Lo que más polémica ha generado es cómo una empresa sin licencia ni certificación puede realizar expediciones tan arriesgadas. Como ellos mismos anuncian, el sumergible es “experimental” y no ha sido aprobado por “ningún organismo regulador.”
Tal escepticismo despertó la preocupación de los científicos de la Sociedad de Tecnología Marina. Aproximadamente 38 expertos enviaron una carta firmada a OceanGate en 2018 criticando el modelo de la empresa. El escrito afirmaba que la compañía y sus sumergibles de “enfoque experimental” no cumplían con los estándares de seguridad de la industria, lo que podría traer “graves consecuencias para todos en la industria.”
Cabe mencionar que la tecnología y la reglamentación de los sumergibles para aguas profundas no están del todo asentadas. Esto, unido al hecho de que la expedición se realiza en aguas internacionales, hace que Titan no tenga que seguir la normativa de ningún país.
Pasajeros Previos Denuncian Casos Similares a Bordo de Titan
Como ya hemos señalado, Titan llegó a ver el Titanic dos veces más desde 2021. Sin embargo, el buque lo ha intentado decenas de veces más. Las malas condiciones meteorológicas y, sobre todo, los problemas técnicos durante la inmersión no le han permitido realizar más viajes. Así lo han corroborado varios miembros de la tripulación que intentaron sumergirse en aguas profundas para ver el Titanic.
David Pogue, de la CBS, y Mike Reiss, guionista de Los Simpson, declararon a la prensa su experiencia en el Titan. El periodista fue el más crítico con su viaje, confirmando que el submarino de OceanGate también se descarriló con él. “Estuvimos perdidos durante dos horas. La comunicación se rompió de alguna manera, y el sumergible nunca llegó al Titanic.” Pogue describió la nave como “experimental y asombrosamente básica,” afirmando que algunas partes parecían “improvisadas.” Por otro lado, Reiss dijo que no tuvo miedo durante la inmersión. Aunque sí confirmó que perdieron comunicación en las cuatro veces previas en las que ha subido a un sumergible OceanGate.
OceanGate Tuvo Una Demanda Federal en 2018
La empresa que gestiona el sumergible desaparecido en el Atlántico Norte fue advertida varias veces del riesgo de la embarcación. Además de la queja del sector, en 2018 OceanGate también se enfrentó a una demanda de un antiguo trabajador. David Lochridge, entonces director de operaciones marítimas de la empresa, redactó un informe negativo sobre la nave. Tras negarse a aceptar las garantías impuestas por el ingeniero jefe, Lochridge fue despedido. Las preocupaciones del ex empleado se centraban en la necesidad de realizar más pruebas de detección de fallos en caso de problemas de presión.
Esto llevó a Lochridge a presentar una demanda federal en el tribunal federal de distrito de Seattle. Alegaba que los pasajeros podían estar en peligro cuando se alcanzaban “profundidades extremas.” OceanGate contraatacó y demandó a Lochridge por incumplimiento de un acuerdo de confidencialidad. Como respuesta, Lochridge presentó otra demanda por despido ilegal tras expresar su desconfianza sobre la seguridad del submarino Titan y su diseño experimental no probado.
“Someten a los Pasajeros a un Peligro Extremo Potencial en un Sumergible Experimental”
Según el experto marítimo, el plan de detección de fallos propuesto por la empresa “era problemático, porque este tipo de análisis acústico solo identificaría un problema cuando un componente estuviera a punto de fallar – lo que ocurriría milisegundos antes de una implosión.”
La demanda sobre el diseño defectuoso del submarino Titan también critica las decisiones de OceanGate. Principalmente, a la hora de obtener los certificados adecuados para garantizar la seguridad. Aunque el sumergible estaba diseñado para descender 4,000 metros, la ventana para pasajeros solo estaba certificada para alcanzar una profundidad de 1,300 metros. Y a pesar del riesgo que entrañaba, la empresa no quiso pagar al fabricante para que elaborara una ventana homologada para 4,000 metros.
¿Exención de Responsabilidades para OceanGate?
OceanGate Expeditions, consciente de los peligros potenciales que conlleva un sumergible experimental, exige que cada miembro de la tripulación que desee participar en el viaje firme una exención de responsabilidad. Este formulario dice específicamente lo siguiente: “Esta embarcación experimental no ha sido aprobada ni certificada por ningún organismo regulador, y podría provocar lesiones físicas, traumas emocionales o la muerte.” El guionista Reiss, de hecho, afirmó que visualizó la palabra “muerte” al menos tres veces en la primera hoja.
Conocedores de las advertencias sobre la falta de seguridad en la embarcación, los expertos creen que OceanGate trató de limpiarse las manos en caso de una posible catástrofe. Esto cobra aún más sentido si analizamos las palabras de Rush en un pódcast en el que participó en 2022. El fundador no dudó en afirmar que invertir en seguridad es “puro despilfarro.” De hecho, se atrevió a animar a los oyentes a lanzarse a la aventura sin valorar demasiado las consecuencias. “Si sólo quieres estar seguro, no salgas de la cama, no entres en tu coche, no hagas nada. En algún momento, vas a correr algún riesgo, y la verdad es que es una cuestión de riesgo-recompensa.”
Es ahora, cuando miles de preguntas legales inundan las mentes de cientos de curiosos. ¿Hasta qué punto puede una empresa jugar con la vida de sus clientes? ¿Eran conscientes los pasajeros de los verdaderos riesgos que conllevaba la inmersión? ¿Por qué no se aplicaron medidas de seguridad más estrictas tras las quejas de antiguos empleados y del sector?
¿Qué es una Renuncia de Responsabilidades?
Es un documento legal que garantiza que los clientes son conscientes de los riesgos inherentes del servicio en cuestión. Al aceptarlo, los particulares afirman que la empresa no se hace responsable de las lesiones o daños causados como consecuencia de ello. En otras palabras, el individuo asume el riesgo que conlleva la prestación que le propone un proveedor. Normalmente, para los servicios que implican ciertos riesgos para la salud, la firma de este formulario de renuncia es obligatoria.
¿Qué Papel Juega el “Deber de Cuidado”?
Cuando se trata del derecho de responsabilidad civil, el deber de cuidado es una obligación legal impuesta a una persona o empresa. Independientemente de que cuente o no con un documento de exención de responsabilidad. Y, por tanto, exige el cumplimiento de un nivel razonable de diligencia para evitar actos que puedan perjudicar a terceros. Es decir, es la obligación moral y legal de una empresa para cumplir con las medidas para garantizar la salud de los empleados o clientes.
En el caso de OceanGate, la empresa tenía un deber de cuidado sobre los miembros de su tripulación. Este deber debía ejercerse mediante protocolos y estableciendo medidas de seguridad de máxima fiabilidad. Tras analizar el oscuro contexto que inunda a la compañía marítima, los conflictos de seguridad que sufrió en los últimos años, y las opiniones de los expertos, hay indicios de negligencia por parte de OceanGate. La falta de transparencia respecto a la fiabilidad del buque, la imprudencia, o la ausencia de protocolos serán aspectos clave ante el tribunal en caso de demanda por el submarino Titan.
Entonces, ¿Puede una Víctima Demandar si ha Firmado una Renuncia de Responsabilidades?
Las exenciones pueden engañar a las víctimas de lesiones para que no exploren sus opciones legales. Y, en consecuencia, renunciarían a cualquier posible demanda como la que probablemente se presente contra el submarino Titan. De ahí la importancia de conocer sus derechos.
Muchas personas creen que cuando firman una exención de responsabilidad por participar en una actividad de riesgo, no tienen derecho a entablar acciones judiciales en caso de lesiones. Pero nada más lejos de la realidad. Hay muchos factores a valorar cuando se produce un daño directo o indirecto bajo la supervisión de una empresa. Por lo tanto, si alguien resultó herido en un parque temático o practicando deportes acuáticos, podrá interponer una reclamación. La clave está, como hemos indicado, en el deber de diligencia.
Ahora bien, que se pueda iniciar un procedimiento judicial no significa que vaya a ser un proceso sencillo. Todo lo contrario. La víctima con lesiones que firmó la renuncia podrá emprender acciones legales. Sin embargo, tendrá que demostrar negligencia grave para que la exención no sea válida. Según la Universidad de Cornell, este concepto de negligencia significa que hubo “una falta de cuidado que demuestra un desprecio temerario por la seguridad o la vida de los demás.”
Este tipo de procedimiento requiere la asistencia y representación de un abogado experto en lesiones personales con experiencia en casos mediáticos con grandes corporaciones. En caso de demanda del submarino Titan, las víctimas necesitarán la asistencia de un experto legal para demostrar que el descargo de responsabilidad es nulo por diversas razones: desde que el personal no estaba formado para la inmersión, la empresa no inspeccionó los defectos para remediar el accidente, o que hubo falta de transparencia sobre el peligro de la situación.
Conozca sus Derechos
Sufrir accidentes con consecuencias trágicas es un proceso muy duro para las familias y las víctimas que sobreviven. Al presentar una demanda basada en accidentes como la de submarino Titan, las víctimas buscan reclamar justicia. Cuando se dan casos de tal magnitud, lo mejor es ponerse en contacto con expertos legales. Ellos se encargarán de su caso de la manera más eficaz. Estos profesionales tienen conocimientos y experiencia previa en todo tipo de litigios. Le representarán para obtener la máxima indemnización posible por los daños causados.
En Adamson Ahdoot, tenemos más de 100 años de experiencia legal combinada en el campo de las lesiones personales. Hemos conseguido acuerdos muy satisfactorios para miles de clientes por todo tipo de accidentes. Si ha sido víctima de una lesión por negligencia, no dude en ponerse en contacto con nuestro equipo.
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