Nuestro cliente y su amigo estaban en el Big Shots Bar situado en Lake Forest. Después de que les sirvieran dos jarras de cerveza, nuestro cliente se enzarzó en una discusión con otro cliente, que era amigo de los porteros. Los guardias de seguridad de Big Shots le dijeron al demandante que abandonara el bar. No obstante, le permitieron terminarse la tercera jarra de cerveza. Los gorilas vieron cómo se bebían la tercera jarra de cerveza y abandonaban el bar en estado de embriaguez.
Después de comprobar que nuestro cliente estaba intoxicado y era incapaz de defenderse, los porteros atacaron al demandante en el aparcamiento del Orange Tree Plaza. Nuestro cliente fue tirado por los pies, golpeándose la cabeza contra el suelo. Ahí, uno de los guardias de seguridad le dio puñetazos y patadas en la cabeza y en la cara. El demandante perdió momentáneamente el conocimiento. No recuerda el resto de la agresión y su siguiente recuerdo es haberse despertado a la mañana siguiente. Mientras estaba en el suelo, el acusado apuñaló al demandante con un cuchillo. Nuestro cliente también fue golpeado con un puño americano.
Nuestro cliente fue atendido por los paramédicos de Care Ambulance Service tras la agresión. Estaba tendido en el suelo y mostraba signos de angustia. A la llegada de los paramédicos, se quejaba de dolor en la cabeza y en la región facial. El examen reveló dolor, sensibilidad, y abrasiones en la cabeza. Además, tenía un hematoma en la órbita izquierda, e hinchazón y contusiones en la cara. Los paramédicos inmovilizaron a nuestro cliente aplicándole restricciones de movimiento en la columna vertebral. Luego le trasladaron al Saddleback Memorial Medical Center para recibir atención médica y una evaluación más exhaustiva.

